Es sabido que los emprendedores más exitosos son aquellos que solucionan problemas que conocen por sí mismos, desde Facebook hasta la línea de productos para bebés sin aditivos químicos peligrosos para la salud que lanzó una conocida actriz y madre Honest Co. vemos que las personas que finalmente logran sacarlos adelante son aquellas que conocen de forma profunda el problema y son capaces de compartir su visión hasta convertirla en un producto o servicio informático.
Sin embargo esto nos deja en una paradoja, en aquellas áreas donde hay problemas y quienes los conocen no tienen acceso a la tecnología informática, no se plantean que esta pueda ayudarles a resolverlos, porque su conocimiento es limitado; y por otra parte quienes conocen de tecnología informática se quedan con su pequeña visión del mundo y resolviendo los problemas de ese nicho que termina siendo reducido.
Tuve la oportunidad de ser mentora del programa Apps.co en su piloto y en las tres primeras iteraciones. Una de las cosas que más nos quejábamos durante los procesos de selección de emprendedores era la cantidad de ideas que eran básicamente la misma vaina, eg: pedidos en restaurantes, donde ir de rumba esta noche, la variante de que eventos hay en la ciudad hoy, una red social, etc, etc. Básicamente personas con mucho potencial, resolviendo problemas que si bien a los ojos de los emprendedores eran muy importantes, si uno mira el contexto de la sociedad en conjunto puede decir que no so los más relevantes.
También tuve la oportunidad de asistir el año pasado a la season 2 del F50 en San Francisco y tuve una percepción similar en algunos de los casos, startups acerca de citas, videos, chat, juegos, compartir fotos… ¿Les suena familiar?
Creo que necesitamos un método para que quienes sabemos de tecnología informática dejemos de mirarnos el ombligo, o el ombligo de nuestros pares y comencemos a dialogar con la gente que hay por ahí con necesidades relevantes en otros campos. No vayamos muy lejos, acérquense a los startups relacionados con la salud y la construcción, y van a encontrar gente haciendo crecer piel humana, casas de material reciclado y un sinnúmero de cosas que dices WOW!
Hay estrategias que se han desarrollado localmente como la Agrotón, que básicamente fue un Hackaton para resolver problemas planteados por el sector rural, pero esto debe trascender de los eventos esporádicos auspiciados por el gobierno, a un diálogo frecuente entre quienes quieren emprender en tecnología y el entorno.
Cada emprendedor TIC debería darse a la tarea de investigar qué necesidades insatisfechas existen, quiénes son los actores de ese problema, cómo llegar a ellos, y después de conocerlos decidir si le interesa o no plantear una solución. Ante todo es salir de nuestra endogamia tecnológica, dejar de usar como referente solo a los mismos emprendimientos TIC para lanzar otro.
Claro, queda un asunto sin resolver ¿Cómo hago para formular una buena solución un problema que no he vivido? y lo que ahí nace es la necesidad del diálogo con el otro que si lo experimenta, ser capaz de escuchar y tener empatía para comprender lo que le ocurre a ese otro y desde ese conocimiento buscar alternativas tecnológicas.
Es un camino inexplorado, todavía dependemos de la línea que el gobierno marca en este sentido, pero es una actitud que quienes desean emprender debería comenzar a desarrollar. Hay que mirar más allá de nuestras pestañas.
Por: Isabel Yepes @iyepes0120